Patines y bicicleta
También me apasiona montar en bici y hacer rutas en patines. Aunque parecidas estas aficiones, ambas van sobre ruedas y recorren kilómetros, cada una aporta beneficios distintos.
Mientras que las rutas en patines son muy sociales, fáciles de hacer, organizar y sin necesidad de mucha logística, los planes con la bicicleta son más laboriosos o, mejor dicho, menos espontáneos, sobre todo si se trata de recorridas superiores a 50 km. No obstante, ofrecen mayores posibilidades porque las ruedas de la bicicleta no se limitan al asfalto y los recorridos ofrecen mayor variedad y paisajes.
En cuanto a los patines, destaco viajes ruteros a Barcelona, Burgos y Córdoba, es muy fácil viajar con ellos y conocer nuevas ciudades rodando por su aslfato. Además de las rutas cotidianas por Madrid capital, he disfrutado de trayectos por Alcalá de Henares, Guadalajara, Segovia... durante jornadas de un día que siempre resultan muy gratificantes. De hecho, en el álbum fotos tengo algunas tomas que pude hacer en viajes con patines, como es el caso de Barcelona y Segovia.
Con la bicicleta he podido participar en rutas de recorridos más largos por la Comunidad de Madrid, he vistiado Aranjuez, San Martín de la Vega, Soto el Real, Boadilla del Monte, Pozuelo de Alarcón, Lagunas del Campillo y Velilla, la Cuenca Alta del Manzanares, la Vía Verde del Tajuña, además de clásicos como el Pardo o los entrenamientos por la Casa de Campo de Madrid y, cómo no, el Anillo Verde.
Tuve la oportunidad de hacer un viaje por Murcia, recorriendo una vía verde que se llama La Vía Verde del Noroeste. Iniciamos el trayecto desde Caravaca de la Cruz, pasando por los diferentes pueblos hasta llegar a Murcia, para terminar en la Manga del Mar Menor. Excelente experiencia.
